La historia de Santa Colette

Colette no buscó ser el centro de atención, pero al hacer la voluntad de Dios ciertamente atrajo mucha atención. Colette nació en Corbie, Francia. A los 21, comenzó a seguir la Regla de la Tercera Orden y se convirtió en ancla, una mujer encerrada en una habitación cuya única abertura era una ventana a una iglesia.

Después de cuatro años de oración y penitencia en esta celda, la dejó. Con la aprobación y el aliento del Papa, se unió a las Clarisas y reintrodujo la Regla primitiva de Santa Clara en los 17 monasterios que estableció. Sus hermanas eran conocidas por su pobreza —rechazaban cualquier ingreso fijo— y por su ayuno perpetuo. El movimiento de reforma de Colette se extendió a otros países y todavía prospera hoy. Colette fue canonizada en 1807.

Reflexión

Colette comenzó su reforma durante la época del Gran Cisma de Occidente (1378-1417) cuando tres hombres afirmaron ser papas y así dividieron el cristianismo occidental. El siglo XV en general fue muy difícil para la Iglesia occidental. Los abusos descuidados durante mucho tiempo costaron muy caro a la Iglesia en el siglo siguiente. La reforma de Colette indicó la necesidad de toda la Iglesia de seguir más de cerca a Cristo.

7 de febrero