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9 de junio | San Efrén

San Efrén

La historia de San Efrén

Poeta, maestro, orador y defensor de la fe, Efrén es el único cristiano siríaco reconocido como doctor de la Iglesia. Asumió la tarea especial de oponerse a las muchas falsas doctrinas rampantes en su tiempo, permaneciendo siempre como un verdadero y enérgico defensor de la Iglesia Católica.

Nacido en Nisibis, Mesopotamia, fue bautizado de joven y se hizo famoso como maestro en su ciudad natal. Cuando el emperador cristiano tuvo que ceder Nisibis a los persas, Efrén huyó como refugiado a Edesa, junto con muchos otros cristianos. Se le atribuye haber atraído gran gloria a la escuela bíblica allí. Fue ordenado diácono pero se negó a convertirse en sacerdote. ¡Se decía que Efrén había evitado la consagración presbiteral fingiendo locura!

Tuvo una pluma prolífica, y sus escritos iluminan mejor su santidad. Aunque no era un hombre de gran erudición, sus obras reflejan una profunda percepción y conocimiento de las Escrituras. Al escribir sobre los misterios de la redención de la humanidad, Efrén revela un espíritu realista y de simpatía humana y una gran devoción a la humanidad de Jesús. Se dice que su relato poético del Juicio Final inspiró a Dante.

Es sorprendente leer que escribió himnos contra los herejes de su época. Tomaba las canciones populares de los grupos heréticos y, usando sus melodías, componía hermosos himnos que encarnaban la doctrina ortodoxa. Ephrem se convirtió en uno de los primeros en introducir el canto en el culto público de la Iglesia como medio de instrucción para los fieles. Sus muchos himnos le han valido el título de "Arpa del Espíritu Santo".

Ephrem prefería una vida sencilla y austera, viviendo en una pequeña cueva con vistas a la ciudad de Edesa. Fue aquí donde murió alrededor del año 373.

Reflexión

Muchos católicos todavía consideran que cantar en la iglesia es un problema, probablemente debido a la piedad bastante individualista que heredaron. Sin embargo, el canto ha sido una tradición tanto del Antiguo como del Nuevo Testamento. Es una excelente manera de expresar y crear un espíritu comunitario de unidad y alegría. Un historiador antiguo testifica que los himnos de Efrén “daban brillo a las asambleas cristianas”. Necesitamos algunos Efrems modernos, y cantantes que cooperen, para hacer lo mismo con nuestras asambleas cristianas de hoy.

9 de junio

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